El Centro e-LEA acogió una emotiva presentación a la que no faltaron ciclistas y vecinos de Urueña
Las campanas tañían las 9 de la mañana. Entorno a un café la Asociación Jesús Negro de Paz organizaba los preparativos del día. Alcalde y teniente alcalde se dirigían al local del Ayuntamiento para dejar las viandas del mediodía. Incertidumbre en el recorrido de MTB, la noche había sido lluviosa y el día amanecía soleado. Se veían las primeras bicis entorno al monolito. Colores heterogéneos, diferentes clubes llegados de toda la provincia. Íscar, Nuria y su padre, compartiendo la misma afición, de violeta los limónchelos, Rancio Bike, Triatlón Rioseco, la Ribera del Duero, Vallabikes…
Los ciclistas inician la ruta con un recorrido por las calles de la villa amurallada dirección Torozos por caminos porosos que dejaban rodar las cubiertas sin calzarse de barro. Recorrieron San Cebrian de Mazote y Santa Espina, en donde pararon para tomar un café. Vuelta a Urueña, en donde aguardaban unos callos con garbanzos de la villa del libro generosidad de los Hnos Rodríguez de Paz y unas alubias con chorizo y oreja. En este sentido, «aprovechar a dar las gracias a nuestros voluntarios, Mercedes de la Rosa y su familia, a Marga, Seve, Víctor que nos ayudaron con la comida», explica el hermano de Jesús Negro, Gregorio.
Más tarde, los deportistas se dirigieron al Centro e-LEA Miguel Delibes, en donde Floren presentaba su libro ‘Conexiones’. En el centro de la mesa se encontraba autor del libro; a la derecha el alcalde de Urueña, Francisco Rodríguez; como moderador, Jesús Pastor; a la izquierda Miguel A. García Marbán, y el director de la Villa del Libro, Luis Enrique Valdés.
La presentación fue muy emotiva, en las palabras de Floren se percibía el cariño y amistad que tenía con su amigo Jesús. Gran asistencia del pueblo de Urueña, el autor fue maestro allí y los vecinos tienen gran estima.
Asimismo, «queremos también dar las gracias a Sergio por su gran trabajo en la iluminación y sonido del evento, así como al centro e-LEA por el recibimiento del acto y a la participación del grupo de teatro Jano», señala Gregorio Negro.
Sin duda, «fue un día entrañable y queremos dar la enhorabuena a Floren por su libro y sus palabras entorno a la amistad que le unía a Jesús, eso era una gran conexión».