Fotografías: FERNANDO FRADEJAS
Medina de Rioseco celebró por segundo año consecutivo la festividad de San Antón únicamente con la misa en la iglesia de San Pedro Mártir, que oficiaron los sacerdotes Juan Carlos Fraile y Alberto Rodríguez, y en la que participaron 12 miembros de la cofradía titular. Debido a la situación sanitaria la hermandad decidió suspender su tradicional merienda a base del típico caldo de gallina, el chorizo y la tortilla.
La cofradía, que cuenta con un total de 13 hermanos, decidió celebrar la festividad sin el nombramiento de un mayordomo, al igual que el pasado año. El presidente de la hermandad, Javier Gallego, lamentó que los actos no pudieran realizarse tal y como manda la tradición; sin embargo, mostró su esperanza de cara al próximo año, en el que «ojalá hayamos superado esta situación y podamos llevar a cabo los actos de manera normal».
Lo que no faltó fue la bendición de los animales, que en esta ocasión estuvieron representados por varios perros.